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Photo : © Beñat

El barrio de Zokoa

Zokoako auzogunea

Situada en un costado de la bahía de Ziburu - San Juan de Luz, Zokoa es un barrio que tiene la particularidad de estar a caballo entre las localidades de Ziburu y Urruña. Fácilmente reconocible por la torre almenada de su fuerte, tiene una identidad muy marcada que reivindican con orgullo sus habitantes.

Zokoa: su puerto y su fuerte

El puerto de Zokoa

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Photo : © Yoni

Zokoa ha sido un pequeño puerto pesquero desde la Edad Media, periodo durante el cual albergó embarcaciones dedicadas a la caza de la ballena.

Los constantes bancos de arena y el cambio en la desembocadura del río Aturri a finales del siglo XIV provocaron el declive del puerto de Baiona y generaron automáticamente una mayor actividad en el de San Juan de Luz, que pronto se quedó pequeño para semejante trasiego. Ya en el año 1530, el puerto de Zokoa, por aquel entonces perteneciente al pueblo de Urruña, era capaz de albergar en su seno a una cuarentena de embarcaciones. Más tarde, 1617, se iniciaron las obras de ampliación del puerto bajo la gestión compartida de los ayuntamientos de Urruña, San Juan de Luz y Ziburu. 

Consta de tres diques: el dique mareógrafo, el dique sur y el "dique pequeño". Con marea baja el puerto se queda completamente seco. 

En la actualidad, el puerto de Zocoa, en el municipio de Ziburu, es utilizado principalmente por pequeñas embarcaciones de pesca o de recreo, así como por los "battelekus", barcos tradicionales de colores que participan en el Trofeo Teink. 

El fuerte de Zokoa

En 1627, Luis XIII ordenó la construcción de un fuerte a fin de proteger los barcos amarrados en el puerto de Zokoa. Rodeado por una muralla, el Fuerte está compuesto por una torre circular, una capilla dedicada a Saint-Pierre y alojamientos. 
Hubo que esperar a la llegada del ingeniero militar Vauban, bajo Luis XIV, para que el fuerte fuese reformado y tomase ese aspecto tan militar que le confiere su torre almenada. Actualmente, está cerrado al público, pero es posible acceder a toda su parte exterior, así como a su pequeña playa. 

El gran dique y los bloques de protección

La construcción de los diques

A lo largo de su historia, San Juan de Luz y Ziburu han sufrido las incesantes sacudidas del mar y han estado siempre a merced de las indomables tormentas invernales, que han provocado la pérdida de 200 metros de costa en 200 años. Hasta que fueron completamente destruidos, las únicas defensas de la bahía eran sus diques naturales.

Se realizaron multitud de obras a fin de solucionar el problema, pero no fue hasta finales del siglo XIX, bajo el mandato de Napoleón III, que se encontró una solución definitiva con la construcción de los tres diques exteriores: el de Zokoa, el del Artha y el de Sainte Barbe. 

Con la consecución de este titánico proyecto, estos tres rompeolas, reforzados con bloques de hormigón sumergidos bajo el agua, velan por la seguridad de ambas localidades desde 1898. Cuando el estado del mar lo permite, el paseo por el dique de Zokoa ofrece unas fantásticas vistas de la bahía con los Pirineos al fondo. 

Los bloques de refuerzo del rompeolas

Desde que se finalizó la construcción de los tres diques en 1898, una operación de refuerzo de los rompeolas tiene lugar anualmente. En temporada estival, en función de las mareas y el viento, una treintena de bloques de hormigón de 50 toneladas cada uno son sumergidos frente a los 3 rompeolas para ayudarles en su función protectora. El método utilizado para su traslado y colocación es el mismo desde finales del siglo XIX: la encargada de colocar estas moles de hormigón es una gabarra que siempre está amarrada en el puerto de Zokoa. 

Los bloques se fabrican en Zokoa y se almacenan en el mismo puerto, a la espera de ser sumergidos. Se pueden ver a orillas del Untxin. 

Como botón de muestra de la fuerza el mar, durante la tormenta que azotó la bahía el 28 de febrero del 2017, una ola depositó uno de estos bloques sobre el dique central de la bahía.

Los bloques de refuerzo del rompeolas

Un barrio con mucha vida

Zokoa es un barrio muy animado y con una amplia oferta de actividades

 

A lo largo del paseo que lleva al fuerte, una sucesión de terrazas muestran al visitante la amplia oferta de restaurantes que ofrece este barrio y que son una auténtica delicia para las papilas gustativas. En Zokoa, la gastronomía local se cuida con mimo, como lo demuestra la comida popular que se celebra durante las fiestas del barrio, generalmente en junio, coincidiendo con el día de la Santísima Trinidad

Sus paseos, la gastronomía, la fiesta, su playa y las diferentes actividades náuticas caracterizan este pequeño rincón de la bahía. ¿Es usted aficionado al paddle surf, la vela, las motos de agua o al buceo? Los profesionales instalados en los alrededores del puerto le ofrecerán un buen servicio y una mejor atención. 

Aunque Zokoa es, ante todo, un barrio en el que cohabitan actividades económicas de muy diversa índole. Tanto su astillero como los talleres del Consejo Departamental, encargado de la fabricación de los bloques de protección de los diques, constituyen un importante polo económico. Una actividad económica que se desarrolla y cohabita en armonía con las actividades ligadas al turismo

El frontón de Zokoa

El frontón de Zokoa se encuentra junto al mar. De junio a agosto acoge un torneo de pala que suele reunir a los mejores jugadores locales.

A modo de anécdota, el armazón del frontón de Zokoa fue construido con los raíles que se utilizaban para transportar diverso material al puerto... son visibles cuando la pintura del frontis está envejecida. 

Centro de actividades náuticas

El paseo a orillas del Untxin 

Conocer Zokoa significa también descubrir el paseo a orillas del río Untxin. El itinerario recorre ambas riberas dando una vuelta de 360º por una vía perfectamente acondicionada. Al final del paseo hay una pasarela de madera que permite cruzar el río. 

Antes de atravesar el puente, que está justo al lado de la playa, el paseo comienza a su izquierda para llevarle hasta una plaza con varias tiendas y restaurantes con terrazas soleadas. Justo aquí, el primer domingo de cada mes se celebra un brocante o mercadillo de antigüedades para disfrute de los paseantes y los amantes de los objetos de segunda mano. A continuación, el paseo llega a una pasarela que le permitirá cruzar a la rivera izquierda del Untxin, perteneciente a Urruña. Todo un lujo para los amantes de la bicicletaexiste además un carril-bici que une Zokoa con el casco antiguo de Urruña, así como con el centro de San Juan de Luz. 

La ruta continúa serpenteando a lo largo del río para pasar por un parque infantil y una zona de picnic, ideal para pasar un rato con los más pequeños. Todos los lunes, en periodo estival, se celebra un mercado en el gran aparcamiento que está a orillas del Untxin. No dude en acercarse y disfrutar del típico y agradable aroma que desprenden sus puestos... 

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